jueves, 9 de noviembre de 2023

EL DESPISTE, Dori Torres

¿Como yo esperaba? No; nada fue como imaginé. Se trataba de una reunión de amigos en la terraza de un gran hotel. Llegué superarreglada: taconazos, melena lisa de peluquería, manicura... ¡Casi era otra! El aire templado y a intervalos el sonido del mar acudía a mí. ¡Es verdad!, tenía el ánimo por las nubes -diría que abocado a ráfagas de euforia- y en los ojos el brillo capaz de provocar al destino. A veces sucede así, sin motivos. Estuvimos bastantes horas hablando animadamente, hasta que uno de ellos empezó a realzar el progreso obtenido por su hijo con el idioma, después de haber pasado unos meses en Inglaterra. A su mirada insistente, añadí -¡metida en mi burbuja!- que el mío estaba muy avanzado en inglés, porque recibía clases de un caníbal tres día en semana. No quedó más que un silencio que remontó con unos improvisados brindis. Hay que señalar que yo seguía junto a ellos, situada fuera del asunto. Sin duda, tuve una sensación de alarma.

     Ya de regreso a casa, sentada en el bus -¡en modo pantera rosa atropellada!-, me dejé caer de espaldas. Latían en mi cabeza las aristas de los repentinos y sonoros brindis una y otra vez. Y de repente, ¡zas!, salté del asiento. «¡Un nativo, un nativo!», exclamé sin más. Gran parte de los ocupantes del bus me miraban, y la persona que estaba sentada a mi lado dijo

-         ¿Pero, un nativo de dónde, de qué?

Me volví a sentar con la mirada lejana. Entonces escuché a un joven decir:

-         ¡Qué pazote, tío, cualquiera diría que acaba de ver a un caníbal!

Cuento alucinado (Para niños grandes). Juana Morante Cayuela

       


 
    En los lechos ignorados de los arroyos que sobreviven en las profundas gargantas de los desiertos que se mueren de sed, se encuentran, a veces, alas de ángeles caídos en las eternas batallas de los titulares del Angelorum oficial de todas las religiones. Léanse: Ángeles, arcángeles, serafines, querubines, coros, potestades y un sinfín más de ellos, que con distintos nombres, según las religiones, constituyen la Corte Celestial de todo reino que se precie, y en nuestro cristiano mundo, el más importante es El Reino de los Cielos.

         Bueno, lo que muy pocos saben, y a los que lo saben les tachan de locos, blasfemos, herejes, etc…es que estos ángeles eran los preferidos de Dios Padre, Dios hijo y Dios espíritu Santo, vaya usted a saber por qué.   “Sobre gusto no hay nada escrito”, dijo no sé quién (lo cual es una mentira evidente, en vista de todo lo que se escribe sobre el tema). Hay rumores de que el motivo de tanta querencia era que ellos hacían más llevadera la vida eterna de La Santísima Trinidad con sus ocurrencias, sus salidas de tono y sus bufonadas, y porque, saltándose el protocolo a la torera, los cubrían de besos y abrazos en cuanto vislumbraban su Divina Presencia, ante la escandalizada concurrencia de todo el resto de sus ministros, que eran muy serios y cumplidores de las normas al uso en el Celestial Gobierno.

         Dios PadreHijoEspírituSanto, (porque eran tres en uno, y que lo expliquen los teólogos), estaba aburrido de tanta lira y tanta adoración, y   cada vez era más proclive a la soñolencia. Por eso se encendía de divino amor, e iluminaba al Sol, la Luna y las estrellas, cuando ellos se acercaban a demostrarle su cariño con besos y achuchones.

         Bueno, a lo que íbamos. Todos los ángeles ortodoxos del Paraíso, decidieron, unánimemente, que la solución a este desorden constitucional era desterrar a estos impresentables, puesto que eran una muy mala influencia para toda la Corte Celestial, y para La Trinidad en particular…Y sin encomendarse a Dios (al diablo no, que aún no estaba inventado) los arrojaron a todos, cielo abajo, hasta la tierra. Allí, los desdichados proscritos, despojándose de sus destrozadas alas, las abandonaron en lugares insospechados, como el que hemos descrito al principio de este relato, y adaptándose a su nueva vida, olvidaron su denominación de origen, es decir “seres celestiales”, para llamarse “seres humanos”. Aunque este proceso fue muy largo, y tuvieron que empezar desde cero, como homínidos, para poco a poco, ir perfeccionándose.

         Dios padre estaba tan triste y tan indignado,  que reuniendo a los ángeles, les hizo prometer,  bajo pena de destierro a los infiernos, que estarían, para siempre, al servicio de estas víctimas de sus celos incontrolados, y para dar ejemplo,  mandó a su Hijo a la tierra, para que les  enseñara el  camino de regreso; aunque esto último, no está muy claro si se ha conseguido, en vista de cómo está el mundo, y además, ellos no quieren volver, prefieren creer en Darwin. Al crecer y multiplicarse, se han encariñado con sus hijos, y les da miedo un dios que deja que muera su hijo entre tormentos. Si al suyo, que es Dios, lo abandona a su suerte, ¿qué sería de los nuestros?  

          ¡Que Dios los perdone, porque saben lo que dicen!  Amén.

lunes, 30 de octubre de 2023

El manuscrito carmesí, de Antonio Gala

 Por Carmen Mª Moreno Sánchez

Buenos días, la novela de este mes fue escrita por Antonio Gala con la cual ganó el Premio Planeta; el argumento se podría resumir diciendo que es una autobiografía ficticia de Boabdil basada en el hallazgo de un supuesto manuscrito escrito por el mismo. Para resumir lo que para mi es el argumento del libro me valgo de párrafos del libro que a continuación transcribo. El primero pertenece a Boabdil:

      " Nunca he entendido por qué el hombre se endiosa tanto que se arroga la obligación de defender a Díos. Como si El no tuviera medios suficientes".

El segundo pertenece a un Obispo cristiano:

   " Matar, entre nosotros, no es infligir un daño; es sólo anticipar la justicia divina. O incluso ejercerla. Se manda el cuerpo a la tierra pues tierra es, y el alma, a gozar del Señor o a ser privada de El en el infierno. En cuanto a los infieles, exterminarlos es un precepto de nuestra santa religión, puesto que se oponen a Dios, de quien es únicamente el poder y la gloria. Salvo que se conviertan; es en la conversión donde está la vida".

 Me ha gustado mucho, muy rico en descripciones, en hechos históricos y en vocabulario. En determinados momentos me ha resultado reiterativo y cargante. 


Por Juana Morante Cayuela 

Fragmentos de la novela que me han gustado especialmente: Son los bellísimos poemas de amor que se intercalaban en Las Mil y Una Noches, y que inspiraron a tantos poetas y místicos de toda Europa, especialmente a los que tuvieron contacto con la cultura islámica, como es nuestro caso.

El autor, Antonio Gala, los ha incorporado al texto de forma magistral.

 

Soy un fruto lascivo y redondeado
         Que alimentan las aguas del jardín.
         Ceñido por un cáliz rugoso,
         Parezco el corazón de un cordero en las garras de un buitre.
(Es un poemita dedicado a la berenjena; evidentemente, tiene doble sentido, y al mismo tiempo es una adivinanza.)
 
         Crezco o decrezco entre los comensales,
         Y, en mitad de la sombra, las lágrimas resbalan por mi cuello.
         Si me duermo, alguien corta mi cabellera,
         Y permanezco insomne hasta mi muerte.
         (Este, como el anterior, convierte en un divertimiento, una adivinanza expresada
         En forma poética . Es la vela).
 
         Soy delgado, y tan pálido y frágil
         Que me dejo acuchillar fácilmente.
         De vez en cuando bebo,
         Y de mis ojos luego brota el llanto.
         (El cálamo)
 
         Lo mismo que la espada nos portamos.
         Inseparables somos.
         Si algo entre las dos gemelas se interpone,
         De común acuerdo lo despedazaremos.
         (….? Las tijeras!)
 
         Soy el traidor a las palomas.
         Antes, cuando fui su amigo, las sostuve temblando.
         Ahora, vibrante, las acoso
         Y les doy muerte con mi lengua.
         (El arco)
 
         Soy el dueño de la brisa.
         Si quiero sopla el céfiro; si quiero, el viento Sur.
         Pero lo que prefiero es acariciar el rostro
         Del más hermoso de los nazaríes.
         (El abanico)
 
         Cuando más necesita su venida,
         Se van del olivar los estorninos…
 
         Lo que temí perder ya lo he perdido;
         Lo que esperé ganar ya no lo espero.
 
         Mi nombre y tú ya estáis
         A salvo en el jardín:
         Fuera del tiempo, su maleficio no os perturbará
                                                                      (Boabdil)
 
         A la vista encanta la belleza de esta diadema,
         Que parece un tejido de brocado.
         Sobre su trono la novia es como el sol
         Brillando en lo más alto de las constelaciones.
         Dos astros se han reunido en este asiento
         Y rivalizan sus deslumbrantes resplandores.
                                                        (Ibn al Yayab)
        
         Le dijeron a Hasán que su mujer
         Era la mujer de todo el pueblo.
         <<Calumnias>>, contestó, <<no me lo creeré
         Hasta que vea la espada dentro de la vaina>>
 
         ¿Qué ha sido de mi cosa? ¿Qué ha sido de mi cosa?
         Desde abajito se me ha caído,
         Igual que un muro al que le faltan los cimientos.
         Si volviera Jesús, el profeta, quizás podría curarte,
         Pero el sitio en el que tienes la enfermedad
         Es difícil que al profeta le gustara tocarlo.
                                                       
         Mis cualidades se corresponden
         Con las de un palacio real:
         Por fuera, manchas y desconchones;
         Por dentro, las maravillas.
 
         De terciopelo son sus flancos, tachonados de alhajas;
         La mano del destino recamó su prodigio.
         Deslumbrante su piel, como un jardín
         Donde florecen las juncias entre anémonas;
         Blanca y jade a la vez,
         Igual que plata sostenida en oro.
         Semejante a unos arriates de narcisos
         En los altos ribazos donde serpea el arroyo.
                                                        (Ibn Zamrak)
 
         Tu cuerpo es una rama de sauce,
         Y tu rostro, la luna llena sobre el estanque, amada.
         Pero no alardees de no otorgar a quien tanto te ama nada tuyo,
         Porque mi mensajero es Nasim,
         Y las ramas terminan siempre por doblegarse ante la brisa,
         Y hasta la luna se deja mecer bajo su soplo.
 
         La mano de la aurora convierte en alcanfor
         El almizcle sombrío de la noche.
         Perfume por perfume, no sé con cual quedarme.
         Renovar los olores no es ninguna torpeza.
         Verdad es lo que afirmas, más no del todo acaso,
         Porque el almizcle es perfume de esponsales,
         Y el alcanfor, perfume de mortajas.
 
         Dicen que soy tu montura.
         Si de ti salgo al campo montada,
         A tu poder me acomodo:
         Como una flecha corro cuando metes tu espuela,
         Y me detengo cuando tú te detienes.
 
         <<Dueño mío –me dice mi amigo-,
         Cambia, hijito, de amor.>>
         <<Cómo hacerlo, si tú eres mi mundo
         Y mi tiempo de flores?
         ¿Por qué dices que yo soy tu dueño?
         Esa palabra sobra.
         Dime sólo cariños y arrullos;
         Hazme sólo arrumacos.
         Lo que quieras  quitar de respeto,
         Me lo añades de amor.
         Aún con leche en los labios, no tengas
         En el pecho alquitrán.>>
 
         Mi corazón –cantaba-  a pesar del invierno,
         Con el amor y el vinillo palpita.
         No he de atrancar la puerta de mi casa
         Por si quien yo me sé viene esta noche.
 
         Por la boca entra el licor que me embriaga
         Y entra el humo venturoso del hachís.
         Pero los restos del vino salen por una espita que no nombro
         Y los restos del humo son sólo risas y humo.
 
         El vino y el hachís son las muletas
         En que me apoyo; de agradecer son ambas;
         Pero la del vino me traba los pies
         Y la del hachís me proporciona alas.
 
         Ay, jilguero, ay, jilguero,
         Pósate en la rama de mi cuerpo,
         Brinca sobre ella y trina,
         Balancéate y canta y haz tu nido en mi pecho,
         Que ya no puede servir para otra cosa.
 
         Desde mí te dan albricias, al orto y al ocaso,
         Las bocas de la dicha, de la amistad y el gozo.
         Arriba se despliega la cúpula excelsa; nosotras somos sus hijas;
 
No obstante, me cabe a mí más gloria y más honor,
         Porque soy el corazón y ellas los miembros,
         Y del corazón sacan  su fuerza el alma y el espíritu.
 
         Si mis hermanas son los signos del Zodíaco,
         En mí y no en ellas es donde el sol esplende
         -decía, en efecto, la inscripción_
         Mi señor Yusuf, valido de Dios, me ha revestido
         Con galas de honor y de honra incomparables.
         Me convirtió en el Trono del Reino, cuya gloria
         Custodian, por la luz, el Asiento y el Trono celestiales.
 
         Los secretos del amor sólo están en la mirada.
         Unos bellos ojos ves que un hechicero creó,
         Y cuando se van, se llevan tu corazón y tu dominio.
         Tu corazón has de ver maniatado y en prisión.
 
         Si vieras cómo es de guapo
         El mozuelo que yo quiero.
         Tiene unas largas pestañas
         Semejantes a saetas,
         Y en los labios, una rosa;
         Pero no alargues la mano;
         Con la boca hay que cortarla.
 
         Maravíllate _dice el poeta_ del que siente que le arden las entrañas
         Y se queja de sed, teniendo el agua fresca en la garganta.
 
         La mano del amor nos ensartó para la alegría;
         Nosotros éramos las perlas, y el deseo era el hilo.
 
         Tus ojos no han dejado en todo mi corazón
         Sitio sin agujeros; como un dedal lo tengo.
         Mi dolor es la almunia donde tú te diviertes;
         Mis ojos, las albercas; una acequia es mi cara.
 
         Mientras la fiesta es tuya, mi corazón se rompe.
         La noche era indecible y era nuestra.
         Pero, como me habías besado a mí al llegar,
         Tú besabas, copero, a todo el mundo.
         Tú besas en la boca, copero, traidor mío…
         La noche se volvió en mi contra como una oscura espada.
         La noche, ardiente y casta,
         Lo mismo que una espada puesta al fuego.
 
         Entretanto, le robo a la amistad tus besos,
         Y con el codo empujo mi soledad a un lado.
        
         Entre tus manos se devana
         Una madeja de todos los colores;
        
         Fuera, llueve sobre Granada.
         La noche da de beber a los jardines,
         Lo mismo que tú a mí;…
 
         El amor no es un huerto, ni un palacio.
         Ni es la gloria, ni el oro, ni el olor de las flores.
         No es la puerta del Paraíso,
         Ni la canción risueña de los días felices, si es que hubo alguno.
         El amor no es un oasis, ni una torre de plata,
         Ni una alegre palmera en medio de la noche.
 
         Tu voz es mi casa, cantor;
         Mala o buena, es mi casa.
         El alba junto a ti
         Es lo mismo que un niño
         Que pela una naranja.
         Sus mondaduras es lo único que tengo
         Para vivir de ahora  en adelante.
 
         …Voy hacia ti igual que quien camina de espaldas y tropieza.
         Te miro, y eres como arena en mis ojos;
         Te toco, y se desprende de mis dedos la piel.
         Al verte comprendí que mi amor
         No iba a ser más pequeño que yo.
         Yo soy mucho más grande que tú, copero, amigo mío,
         Porque te llevo dentro y no puedo encontrarte.
 
         Para tus herederos no hay herencia; ni trino, ni arrayán,
         Ni limpia sombra, ni agua alegre.
         Los cuervos te parecen, desde abajo,
         Las aves de la misericordia.
                                                                                     BOABDIL
                                                                  (Elegía de Almutamid)


jueves, 25 de mayo de 2023

“Las Cenizas de Ángela”

 


                                          Por María Mérida Benítez

 

Autor;  Frank McCourt: Nació en Brooklyn, Nueva York (América del Norte) en 1930; murió en Nueva York en 2009.

 


“Las Cenizas de Ángela” fue llevada al cine en 1999 y la novela fue ganadora del premio Pulitzer.

 

El autor y protagonista (es una novela autobiográfica) se trasladó a Irlanda en la época de la gran crisis con sus padres y hermanos, a la ciudad irlandesa de Limerick donde vivía su familia materna, ya que su padre era del Norte. Se crio en los suburbios de esta ciudad.

 

Además de su vida, nos cuenta de forma muy cruda pero sin faltar al sentido del humor una serie de temas sociales como:

 


La miseria en Irlanda.

Durante la gran hambruna (1845 -1849) murieron más de un millón de personas, este suceso entró en la memoria social y se convirtió en punto de reunión de los movimientos nacionalistas.

 

El maltrato en los colegios. En un informe hecho en 2014 se calcula que 35.000 niños sufrieron abusos en colegios religiosos.

 

La mortalidad infantil. Se le mueren 3 hijos a la misma familia, en esos años la mortalidad infantil en Irlanda era el doble que la actual. 

 

La influencia y el poder de la iglesia católica.

 

El nacionalismo y el catolicismo están justificados, ya que es una forma de defenderse de los abusos cometidos por los ingleses, tanto a sus creencias y costumbres como a sus propiedades.

Frank se asombra cuando el profesor dice que los irlandeses también cometieron actos crueles en la guerra, por ejemplo en la batalla de Kensale en 1601, ya que durante toda su infancia le habían inculcado las virtudes de los irlandeses.

 

El Alcoholismo. Existía un ritual en el que a los 17 años el niño iba con el padre y le iniciaba en tomar cerveza.

 

La mitología. Nos habla de Cuchulain, personaje mitológico de Irlanda del Norte. El edificio de correos de Dublín fue destruido en la revolución de pascua en 1916,  al reconstruirlo se colocó una estatua de Cuchulain como héroe nacional, es el Aquiles irlandés.

 


El libro es la historia de una familia irlandesa numerosa cuyo padre no tiene trabajo y cuando consigue algún ingreso se lo gasta en cerveza. Cuando llegan a Irlanda desde Estados Unidos, el país está sumido en una crisis económica, pues acaban de sucederse varias revoluciones y se acaban de independizar de Inglaterra, con el aislamiento económico que supuso. Además estalló la II Guerra Mundial. Como su prioridad es no morir de hambre, llama la atención cuando hablan de Hitler, que no les importaría tenerlo con tal de poder comer. Hay una parte que resulta muy impactante cuando se refieren a la pobreza de los callejones. Como los padres se iban a trabajar a Inglaterra (que había sido invadida por los alemanes) mejora su nivel de vida así que “dan gracias a Dios de que exista Hitler, porque si no hubiera invadido toda Europa, los hombres de Irlanda seguirían en sus casas rascándose el culo en la cola de la oficina de empleo”.

 

Para hacer más soportable la lectura, el autor juega con crearnos esperanza, cuando empieza un trabajo y crees que va a levantar cabeza vuelve a caer de nuevo. Esta es la tónica de la infancia de Frank y su familia, que lo más que consigue es comer un par de días. No se explica cómo Frank y su hermano consiguieron sobrevivir y llegar a América, y convertirse en un gran escritor y un gran actor respectivamente.

 

El integrismo, tanto de la iglesia como del nacionalismo, tiene su explicación debido al trato recibido en su larga historia con los británicos y escoceses. Los católicos fueron perseguidos, y desde la época de Enrique VIII se le arrebataban sus propiedades. Los pobres no tenían derecho a estudiar y eran rechazados por la iglesia cuando pretendían participar en ella. La madre le dice una vez, que la iglesia le habían rechazado tres veces.

 

Se hace soportable la lectura porque además de estar bien escrita, sin faltar a sus toques de humor, los niños viven felices con su familia. Al padre no le importa mucho que no coman, pero no les maltrata y para el protagonista es como un Dios. La pobreza deshumaniza a las personas y tanto la abuela como la tía no le prestan mucha ayuda. Me cuesta hablar de la madre pues creo que es la mayor víctima del libro, es una mujer con poca iniciativa y anda sumida en una pena que no es para menos.

 

Tras ver cómo se desarrolla la historia me surge una duda: si no se hubiera criado bajo la influencia del catolicismo ¿hubiera triunfado igual y habría sufrido menos o por el contrario se hubiera desmadrado y no hubiera tenido desde pequeño esas ganas de luchar para salir adelante él y los suyos?

 

21 de mayo 2023. María Mérida

lunes, 17 de abril de 2023

“ La víspera de casi todo”. Autor: Víctor del Árbol

             Por María Mérida Benítez 

El autor nació en Barcelona en 1968,  fue Mosso D´esquadra desde 1992 al 2012, trabajó en la radio y cursó estudios de historia.

Fue premio Tiflos de novela en el 2006, finalista en los premios Lara 2008, posee algunos premios más a nivel europeo. Por esta novela obtuvo el premio Nadal en 2016.

La víspera de casi todo es una novela que se lee con facilidad pero de relatos muy duros. Está escrita en capítulos donde se van mezclando la vida de los protagonistas que pertenecen a distintos niveles sociales,  la mayoría tienen en común una infancia difícil y llena de tragedias.

La novela está ambientada en La Coruña, y más concretamente en la Costa Da Morte, que él llama Costa Caliente, y muchos episodios transcurren en su faro. También aparece Barcelona, Málaga, Alemania y Buenos Aires.

Los protagonistas sufrieron violaciones en su infancia y una de ellas fue asesinada por su violador. Nos hace un amplio relato sobre las víctimas de dos dictaduras militares muy cruentas y presentes en nuestra memoria, como fueron la española y la argentina.

En el sistema patriarcal descrito en esta obra son víctimas los hombres porque se convierten en sus propios verdugos,  a pesar de que asesinen a mujeres.

Tanto Paola como Dolores, las protagonistas femeninas de esta novela, a pesar de haberle robado lo más importante en sus vidas, intentan salir adelante sin hacer daño a su alrededor.

Trata las violaciones y malos tratos de forma muy real y se sufre a leerlo. Presenta al torturador utilizando los mismos métodos psicológicos que el marido maltratador, haciendo culpable a la víctima de forma que sienta lástima por su verdugo. El autor dice en una entrevista concedida a Antena 3 que el libro “te estremecerá, te removerá el alma y la mente”.

Nos presenta una policía poco eficaz, y un comisario amargado y alcohólico, donde los traumas de la infancia hacen que se vaya de la mano a la hora del cumplimiento de su deber, matando a uno de los detenidos.

Hay que destacar el papel de Mauricio, que a pesar de todo el daño sufrido a lo largo de su vida, se da cuenta que con la venganza no va a recuperar lo perdido.

Al final del libro casi todos sufren su castigo, excepto el torturador cuya muerte es  como un regalo ya que estaba condenado a morir por enfermedad. Sin embargo, la Pecosa y tantos otros desaparecidos víctimas de los militares argentinos no tuvieron ninguna oportunidad.

Juan Gelman fue un poeta argentino mejicano duramente represaliado que perdió a su hijo y nuera, incluso a su nieta que fue robada tras nacer. Participó como militante activo en grupos guerrilleros como la FAR y los Montoneros, falleció en México en el 2014. Mauricio regaló a Oliverio un libro de Gelman donde, escribiendo en los márgenes del mismo, se establecen unos diálogos que son dignos de mencionar. A Oliverio le molesta la inocencia del poeta donde  le pregunta “¿Para qué sirve esa máquina de la palabra, para transformar las heridas en versos?”  Y el poeta le respondía “La memoria es una cajita que resuelvo sin solución”. Oliverio en aquel diálogo de sordos decía “La memoria no tiene remedio” a lo que Mauricio respondió “Lo que no tiene remedio es el pasado. Pero la memoria es una forma de inventar el presente”.

Aquí tenemos la justificación del torturador:  Oliverio no entendía aquellas palabras.  “En el ahora hay sufrimiento, desde luego. Pero se equivocaban el poeta y Mauricio, y todos los que dividían a los hombres entre culpables e inocentes. En realidad no existe tal cosa. Cada uno se entrelazaba con el otro y creaba un equilibrio permanente. No era posible escoger entre el bien y el mal; no tenía sentido (...) Había que vivir y, para lograrlo, todo estaba permitido. Esa era la ciencia amarga que se debía aprender al salir del útero. En ello se reafirmaba mientras  desmenuzaba lo leído en aquel libro” Mauricio responde “Llámalo como quieras. Los muertos se fueron y no van a volver”.

En el caso de Oliverio, como en la mayoría de torturadores y genocidas, mueren en su cama, y en este caso murió con un tiro de gracia.

Acabo  con un poema de Juan Gelman.

El juego en que andamos

Si me dieran a elegir, yo elegiría
esta salud de saber que estamos muy enfermos,
esta dicha de andar tan infelices.
Si me dieran a elegir, yo elegiría
esta inocencia de no ser un inocente,
esta pureza en que ando por impuro.
Si me dieran a elegir, yo elegiría
este amor con que odio,
esta esperanza que come panes desesperados.
Aquí pasa, señores,  que me juego la muerte.

lunes, 28 de noviembre de 2022

TIERRA, de Eloy Moreno

                         Por Felisa Molinero Torres 

En una cabaña, un padre hace una promesa a sus dos hijos (niño y niña). Debían pensar en lo que más querían en la vida, y si acababan el juego propuesto, lo conseguirían. El juego no terminó. Pasaron los años, uno de los niños consiguió lo que había pensado, la niña no. Pasado un tiempo, y muerto ya el padre, ella recibe un paquete que le ayudara a jugarlo.

Por otro lado y en paralelo se va desarrollando otra historia: un concurso televisivo en ocho personas participan en una aventura espacial (el libro empieza diciendo “ en la tele todo es mentira").

Y así se va escribiendo la historia en la que nuestra protagonista viajará a diversos lugares del planeta, para conocer la verdad. (¿El resto?os dejo que lo averigüéis vosotros, para no quitarle sorpresa a la historia).

La novela la encuadraría en novela de ficción, con un planteamiento novedoso y con su moraleja final. El tema engancha desde el principio por la forma en la que va relatando la trama muy en consonancia con los reality que tenemos todos los días en la tv (influencers, los redes sociales, el manejo del poder del dinero, la inmediatez, la contaminación planeta, los medios de comunicación, los dilemas morales…) refleja muy bien y hace una fuerte crítica a la sociedad moderna.

El libro tiene una escritura fluida, de lectura fácil, con relatos cortos entremezclando las historias que se enredan y se necesitan las unas de las otras para resolver el final. Es intrigante y motivante, por la necesidad que nos va creando de conocer ese final. De principio su lectura se coge con fuerza y te va atrapando, sobre todo sus primeras páginas, siendo el final menos interesante y más predecible.


Por Pilar López Palomo

He descubierto al escritor Eloy Moreno Olaria con su novela Tierra. Como no me gusta revelar argumento os haré un breve comentario sobre la misma. Y sobre todo lo que sentí cuando la leía.

Tierra es una novela escrita en un lenguaje sencillo y directo, con una organización que  a mí me recordó a las telenovelas o series que pretenden captar la atención del telespectador. Capítulos muy cortos intercambiando los acontecimientos ocurridos en dos líneas temporales, siempre dejando al lector con una intriga al final de cada uno. Lo cual hace la lectura ligera y amena hasta cierto momento, pues en el nudo tanto cambio de tiempo y de personajes me resultó un poco abrumador, ya que mi mente tenía que conectar y desconectar muy a menudo y eché en falta capítulos un poco más largos.

Es una novela que nos habla de los problemas actuales de la sociedad dentro de una narrativa que te atrapa. La gran importancia de los medios de comunicación, los grandes capitales, la manipulación de las masas, la importancia de las redes sociales en la actualidad, la violencia, la importancia de la propia imagen, la contaminación y el cambio climático... Son descritos con fluidez y claridad, creando una visión negativa y pesimista de la sociedad. ¿Cómo podremos cambiarla? Es una pregunta que en un momento nos hacemos cuando la estamos leyendo y te sientes impotente ante la realidad.

 Sin embargo al final brilla un poco de esperanza, yo  diría que "mientras haya vida hay esperanza".

 Me ha gustado esta novela y leeré otros libros de este autor pues conecta con el lector y describe la sociedad en la que vivimos. Actualmente estoy leyendo "El bolígrafo de gel verde" del mismo autor, su primera novela que autopublicó y fue un éxito.

miércoles, 2 de noviembre de 2022

ARENA, de Miguel A. Oeste

 


Tras la lectura del libro Arena, de Miguel Ángel Oeste en el Club de lectura de la biblioteca Cristóbal Cuevas, publicamos las siguientes reseñas

... Por Paula T. Rejón Rodríguez

Escrita por Miguel Ángel Oeste, Arena es una novela sobre la memoria, la familia, la juventud y el trauma.

La historia transcurre un verano durante la década de los 90. Bruno narra las aventuras con su grupo de amigos, jóvenes de entre 16 y 17 años que pasan su tiempo libre fundamentalmente en bares, discos y en la playa, siendo este último lugar recurrente en sus reuniones. El protagonista se encuentra en un punto vital en el que deja atrás su niñez para adentrarse paulatinamente en una edad más adulta, en la que tendrá que ir tomando decisiones trascendentales y deberá también enfrentarse a nuevas responsabilidades.

Hasta aquí todo concuerda con la historia de cualquier adolescente, pero desgraciadamente, debe abordar esta etapa a rastras pues lleva sobre sus hombros un pesado y afilado dolor.

Bruno vive junto con sus amigos vivencias y tentaciones típicas de la edad, amoríos, drogas, y fiestas que afronta con una desprotección especial, ya que parte de un ambiente familiar duro, sórdido y abusivo. El libro está lleno de detalles que como lector debes hilar para estructurar esta idea en la mente, porque aunque está constantemente presente en las páginas, se trata de un lúgubre puzzle que con paciencia debes armar.

La familia debería ser un lugar seguro, pero para él es todo lo contrario. Es aquí donde entra la figura de "El Pérez" un vagabundo del barrio, que logra trasmitirle esa familiaridad y le ofrece compañía y consejos de manera desinteresada.

La actitud autodestructiva, el exceso de alcohol, las discusiones con sus amigos o la práctica de sexo sin mirar las consecuencias es una manera de buscar una salida urgente. Necesita salir de su mente. No posee herramientas para comunicar su malestar a sus amigos. Esto provoca que crezca en un ambiente hostil sin que nadie pueda percibirlo.

El texto recoge expresiones, paisajes y tradiciones propias de Málaga y además permite visualizar con suma claridad el característico verano caluroso, pegajoso y en ocasiones asfixiante del Sur.

Para mí y creo que para casi cualquiera que sumerja en sus páginas, resulta una lectura incómoda que provoca cierto shock, llegando a ser desagradable. Pero a la vez tiene puntos donde se muestra tierna y entrañable. Se trata de una novela que te envuelve hasta decir basta. Aires de juventud, mezclados con agrias vivencias familiares que removerán tu alma y entrañas.

... Por Carmen Mª Moreno Sánchez

De lectura ágil y rápida me ha gustado en líneas generales como desarrolla la trama viajando en el tiempo desde el pasado al presente y viceversa.

La historia es triste y trágica y esperas que Bruno sea rescatado de alguna manera porque resulta duro y sobrecogedor que un adolescente viva lo que relata. Envuelve toda la novela de un halo de misterio que finalmente queda sin resolver siendo esta quizás la intención del autor dejando margen al lector para que este establezca sus propias conclusiones.

En resumen triste, caótica, original con muy buen dominio de los tiempos y el lenguaje.

La historia me ha dejado “mal sabor de boca” y mucha impotencia.